24 mayo, 2005

Una OMB para Chile

Hace unos días estuvo en Chile Allen Schick, profesor de la escuela de asuntos públicos de la Universidad de Maryland, quien es uno de los mayores referentes en materia presupuestaria y gestión pública a nivel mundial.Señaló que el manejo de los recursos fiscales de nuestro país está en un nivel muy superior en América Latina y de varios países de la OCDE, lo que es un reflejo de su creciente tendencia a incorporar la mecánica de presupuesto en base a resultados.

Asimismo, Schick planteó la posibilidad de incorporar cambios al rol que actualmente desempeña la Contraloría General de la República. A su juicio, esta entidad pública debería moverse paulatinamente desde lo que hace hoy, que es supervisar la legalidad de los gastos, para centrar más su atención en supervisar los resultados de estos gastos una vez que ya se hicieron.

Es decir, generar capacidades institucionales en la Contraloría similares a las desplegadas por la Office of Managemenet and Budget (OMB) de Estados Unidos, entidad que justamente realiza análisis ex ante de pertenencia de políticas públicas, y evaluación ex post de su impacto. Todo un desafío de autocrítica para el poder ejecutivo chileno que ha centrado sus evaluaciones ex post únicamente en el sistema de evaluación de programas públicos dirigido por la DIPRES, pero no de políticas implementadas centralmente por los Ministerios.

Sin embargo, compartiendo lo deseable de realizar ese tipo de evaluaciones me parece complejo realizarlo desde la Contraloría, principalmente porque no es una institución diseñada para tal efecto. Su funcionariado está compuesto fundamentalmente por abogados y administrativos que realizan el control de legalidad, con una fuerte cultura interna orientada exclusivamente a esos fines.Las tareas de evaluación ex post implicarían contar con un contingente de profesionales vinculados a la economía y las políticas sociales, con alto grado de conocimiento sectorial y habilidades en el análisis cuantitativo y cualitativo, recurso no fácil de incorporar coherentemente en el actual diseño de la Contraloría.

Por eso es que parece más sensato crear una nueva institucionalidad de similar jerarquía legal y autonomía abocada en exclusiva a realizar esas importantes tareas de evaluación. Una OMB para Chile

06 mayo, 2005

El estilo de Tony

Tony Blair acaba de ganarse la confianza de los británicos para gobernar un tercer mandato, por primera vez en la historia del partido laborista. Ganó con menor diferencia que la vez anterior, pero de igual forma sigue siendo impresionante que Blair hubiese logrado una victoria considerando que la mayoría de los británicos le estaban dando la espalda sólo unos meses atrás por su política en la guerra de Irak.

¿Cómo lo logró? Tony Blair puede que sea considerado por los británicos como mentiroso por lo de Irak, pero no ha perdido su notable habilidad carismática y capacidad para mostrarle a sus compatriotas una visión de de futuro común, lo opuesto del líder tory Howard. Eso es lo que la gente pide de los políticos en Inglaterra, Chile o cualquier lugar del mundo. Una demostración de ese carisma se puede apreciar en el exultante discurso con que dió inicio a su campaña hace un par de meses.

Las similitudes de la situación política entre la elección británica y las próximas elecciones presidenciales chilenas están a la vista: es al final un plebiscito respecto de si debe seguir la Concertación o no. Esperemos que algo del mensaje y estilo de Tony para decir las ideas pueda ser aprendido en la campaña de la Concertación